miércoles, noviembre 17, 2004

el sueño de A.

...entoces los edificios se hicieron largos. crecieron por horas o dias o siglos o milenios crecieron verdes y elongados. por supuesto. al principio grises y ocres como edificios pero luego cafe brillante y amarillo y naranja tierra y luego verde oscuro pero mas tarde verde vivo, verde calido luego un verde como el verde de las peliculas en blanco y negro, verde elongado, verde abstraido y triste. entonces se Hizo el verde largo y los edificios crecieron hasta alcanzar el suelo y alli antes de tocarlo conectando los polos opuestos del sueño en puente polimorfo poco tiempo antes de tocarlo, unos instantes antes de tocarlo. instantes repetitivos. justo antes de tocarlo, iba y venia de la imagen y el encuadre se hacia solo el instante preciso, una y otra vez, en que los edificios se elongaban de colores y la mirada se hacia solo la punta vegetal de un edificio llegando al suelo palido con ese gesto de tentaculo al mismo tiempo resuelto y asustado, como la extremidad de un animal imposible que explora todo con constancia animal y vegetal y alienigena. un tentaculo de carne verde tupida de sentidos y receptaculos nerviosos, una especie de fibra salida del centro del ser extendiendose a la periferia del ser, a la periferia del mundo. constante. alli van las fibras de una colonia de seres palpando a cada segundo con sus construcciones magnificas cayendo. y cayendo. en ese instante fugaz la punta del edificio verde tentaculo cuidadoso transmisor de informacion acerca del ambiente antena movil edificio en caida atemporal cuando las moleculas de la punta se acercan al suelo excitando las moleculas del suelo en un remolino de electrones girando en orbitas hiperveloces alli, alli el edificio se convierte en liquido. gota espesa. fluido en caida esferica aplastandose en coreografia contra la superficie explotando como una corona perfecta dibujada por la tension del liquido y las fuerzas de caida y resistencia.
antena liquida. docenas de gotas cayendo y el espectaculo magnifico llenando la habitacion. una lluvia inmensa de tentaculos cayendo exploratorios y explotando en gotas perfectas. y un sonido de metamorfosis permanente. miles, millones de crisalidas cayendo de un techo en cuadricula de cemento a un suelo plano y explotando en la caida como seres perfectamente realizados. asi eran los tentaculos lluvia. una tormenta de vida. entonces, aunque no lo he mencionado, alli estaba yo. en el cuarto, al principio viendo y luego sintiendo pero cuando dirigia, digamos, una mano a todo esto que sucedia como mil transparencias de ciudades en crecimiento acelerado ya no estaba. era fantasma y las gotas caian sin cambiar como en un lago calmadisimo en medio de una tormenta nocturna. cada gota creando una contrareaccion instantanea dando el efecto de una superficie texturizada. un cuarto sin paredes. un lago infinito. pero siempre un cuarto. es eso posible? un cuarto sin espacio ni tiempo? y sin embargo con su identidad de receptaculo? la sensacion era de desorden con cierta direccion. como un televisior en un canal muerto. haz visto una pantalla sintonizada en un canal muerto? hay tantos patrones, hay tanta mas vida al acercar los ojos, aunque de lejos se vea como un liquido excitado pero siempre homogeneo. el cuarto estaba hecho de pantallas semitransparentes alineadas en una rejilla tridimensional.
sin pensarlo estaba en un cuarto lleno de edificios y pantallas liquidas. canales de muchos mundos. pase el dedo por una de las pantallas y una gota horizontal se despego y floto hacia mi rostro, entonces estaba yo acostada con el techo en las narices y una gota caia lentamente hacia mi rostro tan lentamente que me preguntaba por la tension que la sostenia entre el muro-pantalla y yo; he llorado y en verdad estoy humedeciendo las paredes o han llorado las paredes y yo estoy a punto de recibir su descarga salina? asi es el llanto que te deja en un estado purificado abstracto como si estuvieras casi listo para recibir la ciudad en tu seno. la gota flotaba cayendo en circulos porque si uno se detenia en el instante veia que la gota de lagrimas de pantalla tenia una rotacion sobre su eje vertical de manera que su caida era un espiral. y si te fijabas en la superficie de la gota habia un reflejo de todo lo demas y de mi cara deformada por el reflejo en una superficie curva. entonces de verme alli empece a reir asi como hacia cuando era chica que pasaba horas mirandome en todas las ollas brillantes de la cocina porque todas me hacian ver a veces con la cara larga a veces redonda. boca ancha. ojos grandes grandes. me reia. reia con todas las formas que podia tomar. la gota temblaba y la risa hacia que los temblores se hicieran mas fuertes. yo era epicentro y todo el cuarto con los edificios-gota-pantallas-plantas temblaba con el terremoto de mi risa. pero era un temblar jovial. nada tragico. era un temblar de baile. los edificios caian con ese gesto de los bailarines que se caen al piso como hojas pesadas todo sucediendo en oleadas de risa, en convulsiones. en ondas circulares como de gota cayendo en estanque tranquilo. asi la risa.

ahora abro la ventana y entra la luz con el viento. pero, como voy a abrir la ventana de un cuarto sin dimensiones? cuan largo es el mundo, es infinito. pero no sucede nada espectacular. la ventana esta abierta y ahora soy ventana. soy todas las ventanas. soy siempre una apertura. de ser ventana me aburre la palabra siempre. que vertigo. retumbo como una campana, vibro como ventana. soy la menbrana que conecta este cuarto con el mundo. abro y cierro. afuera pasan vehiculos que hacen que yo vibre y vibre haciendo un sonido como si todo se fuera a caer. pienso que la risa de antes debio hacer caer los vidrios de la ventana, debio romperlos en pedazos como hacen los terremotos, hacerlos trizas con ese sonido espectacular de los vidrios al quebrarse. ese sonido encantador de campanitas desesperadas. pero en realidad los vidrios estan intactos. son tan flexibles, son liquidos. paso mucho tiempo sintiendome ser ventana. siento que la luz me atravieza y me dan cosquillas en el torso. siento que me dejo ir y el aire pasa, soy un anillo que forma los dedos del aire entrando y palpando todo adentro. orino la lluvia al interior del cuarto y es una sensacion refrescante, traviesa. las plantas adentro se bambolean agradecidas por la lluvia y los ojillos de sus hojas se abren diminutos respirando. soy una frontera. sostengo elaboradas conversaciones con insectos asombrados por la lisura de mi superficie. "es un liquido impecablemente detenido en su mejor gesto", deletraean en enjambres con cuerpos de filigrana. me pregunto entonces si las letras son insectos o la materia ultima que construye el edificio. o son hilos. los hilos que lo tejen. o son bloques diminutos apilados cuidadosamente. llueve y me pregunto si las letras son gotas. decido detener la lluvia con toda mi superficie y ella cae sensual e insistente deletreando tambien como un cienpies sobre el vidrio. letras liquidas. soy tan tan pequeña, soy una ventana. imitando la forma del edificio, sosteniendo sus cuatro esquinas desde otra dimension. soy grande, soy una ventana. soy el edificio en su forma de vacio y de esa manera lo origino. el edificio es la replica de mi estructura basica. el edificio es la sombra proyectada por el objeto ventana. ser ventana es tarea compleja. estoy tan cansada de ser ventana que me empiezo a quedar dormida. las cortinas se cierran vacilantes. parpados. caen y vuelven a subir. caen. la oscuridad se hace y me desvanezco. cierro los ojos-ventana. no hay negrura. hay tonos rojizos como la luz del sol a travez de los parpados de la tierra. es un atardecer que llega perforando las nubes. es una despedida iridiscente. los rayos del sol sangrando por el roce de la atmosfera en su carrera tangencial. me pregunto si el cuarto y la ventana estan en un planeta. como es ese planeta? es un cubo con una piramide encima que flota en un mar oscuro?

en el cuarto las sombras de los edificios son simples lineas de luz y de sombras. supongo que la luz viene desde adentro, al menos un poco. la trama se forma tambien con la luz que viene de afuera y las sombras que proyectan las cortinas. es todo tan simple. este es un cuarto cualquiera, es un cuarto vacio excepto por mi cuerpo en una esquina. es un cuarto de ciudad a medio construir. es un cuarto con ventana de aluminio y cortinas de tiras verticales que se mueven con una brisa imperceptible. es un cuarto silencioso y sin pretensiones. en este cuarto nada pasa. si yo dijera que es el fin del mundo estaria en lo cierto y no podria estar mas equivocada. decir el cuarto lo esquiva por completo. sentada en la esquina piso duro tres vertices se encuentran. convergen enloquecidos en mi espalda. mi cuerpo esta en contacto con cada una de los tres planos que convergen alli y eso le da una flaccidez tranquilizante. vibro como una campana y reboto como el sonido. esa ubicacion hace de mi imagen un eco perfecto. interseccion de ondas viajeras. me encuentro en una posicion de resonancia y conciencia de esa resonancia. al mismo tiempo estoy lejos de la ventana. desde aqui la ventana parece un objeto aun mas ominoso. acelerada por sus cuatro esquinas, la ventana sostiene el vertigo del afuera y la espesura del adentro. como pude ser ventana? debio ser un capricho absoluto. ser ventana es aterrador, llevar todo ese dolor y al mismo tiempo mantener la compostura. la ventana es dolor de parto. la ventana incorpora el frio que senti cuando sali del utero, la primera rafaga de viento que me robo el poco calor que llevaba en la piel. la ventana es orificio. boca, ano, vagina, oido, fosa. encarna la organicidad de la habitacion. la ventana es sutura entre dos mundos.

la esquina es un abrazo. adormecida pienso en todo lo que es bueno. las imagenes brotan de entre mis piernas. mis ojos son dos fuentes. de todos mis orificios brota un liquido luminoso rico en imagenes. me nutro. lleno la habitacion. la inundo. soy una fuente interminable. no siento angustia ni desasociego. no me siento vacia ni llena. no me siento conducto ni conductor. solo plenitud desbordante. soy todo lo demas sin originarlo. soy infinita. me expando en todas direcciones sin tiempo ni espacio. de este modo, por los siglos de los siglos mantengo la temperatura ideal del cuarto. el fluir constante. no hay nada que pueda temer y mi cuerpo no esta incapacitado por ser fuente. puedo caminar, puedo vivir y hablar como cualquier otro ser que lo habita. olvido en poco tiempo que aquello que brota de mi constantemente existe y llena el lugar. me dedico a explorarlo en su luminosidad. al principio me sorprende que no sea un reflejo de mi. ha crecido en formas y especies llenas de creatividad. me levanto de la esquina. doy un paso hacia el centro y vuelvo a sentarme sobre el suelo. ahora tengo espacio para extender las manos hacia atras. las planto detras de mi espalda. me sostienen. desde esta perspectiva el techo se abre como una boveda. es una pantalla de tela finisima y los cielos se podrian ver mas alla si observara con suficiente atencion. el techo hace una curva deliciosa que complementa la linea recta de todos los vertices. es un misterio optico. me pregunto que tan alto esa? cuantas eras me tomaria alcanzarlo para rozarlo con los dedos tan solo. esta lejos y esta tan cerca. este techo plano es un gran misterio al que tengo que prestar mas atencion. ya alguien me lo habia susurrado al oido y yo lo habia percibido como una ofensa. pero como puedes prestar mas atencion al techo que a mi? habia dicho con mi voz adoldescente. ahora, sin embargo, el techo evoca algo recondito como una paz corporal. como un silencio de animal. no se me da la espalda o me observa con cuidado. es un ser amorfo, casi siempre continuo y uno no podria adivinar si se ha divorciado enteramente de las paredes o si es su mejor aliado. no quiero ser techo. no voy a ser techo. desde aqui lo alcanzo con la mirada. tengo una mirada tactil. el techo me rodea de pies a cabeza. cuando me inclino hacia adelante y traigo las manos a mis piernas estoy en un lugar sin puntos cardinales. me aferro a mis pies preguntandoles como a un oraculo. y ellos responden con su sabiduria estilizada. no hay arriba ni abajo. estoy sentada en el techo? no es asi? estoy cabeza abajo como una mosca. como una hormiga. como una araña. pero el concepto de arriba y abajo se me hace desdeñable. el vuelo y la levitacion no tienen importancia en un lugar sin gravedad. las convenciones son una materialidad de los lugares en los que no han crecido habitaciones.
los pies estan libres en cualquier elemento.